El sector avícola está evolucionando a nivel mundial. En
los 20 años las condiciones han cambiado y el galpón tradicional peruano está
quedando atrás. Edgardo Landa, Director Comercial de INVETSA, explica los factores
que están incitando un cambio en la avicultura del país y cómo la inversión en
tecnología puede impulsar el desarrollo de la industria que produce la
principal fuente de proteína en el país.
1. Cambio climático.
Las
temperaturas son más extremas, las zonas
de clima cálido son mucho más calurosas y en las zonas frías la temperatura baja
de manera extrema.
2. Genética de las aves.
Las casas de
genética han logrado sacar un producto más eficiente y hoy se puede lograr el
peso esperado entre 40 y 42 días, hace 40 años esto se lograba en más de 70
días.
3. Expansión de las ciudades.
Cada vez
existen menos zonas para crianza animal, lo que requiere que en el mismo
espacio exista más densidad de pollos por metro cuadrado.
4. Escases de la mano de obra.
El desarrollo
social del país, el acceso a mejor educación y los mejores salarios en sectores
como agricultura y minería, han disminuido el interés de trabajar en granjas. Es
así que si antes la familia entera se dedicaba al cuidado de las aves, su
alimentación, control de la temperatura y limpieza del galpón; hoy, la segunda
generación prefiere estudiar una carrera universitaria o técnica.
5. Globalización.
Los
parámetros competitivos de la región exigen que la avicultura peruana impulse
un desarrollo para alcanzar e incluso superar la producción de los países
vecinos. De lo contrario, corremos el riesgo que en un futuro sea más barato
importar que producir carne de aves.
De
galpones a fábricas de carne de pollo y fábricas de huevo
¿Cómo puede una granja enfrentar estos
factores de cambio? Invirtiendo en la automatización de sus galpones. Es decir,
adquirir equipamiento pecuario que van a permitir reducir costos y pérdidas,
brindar mejores condiciones a los animales y conseguir un mejor producto final.
Invetsa ha desarrollado un galpón
automatizado al 100% en una granja de Pisco, como un proyecto piloto. El
resultado ha sido que la producción de este galpón ha mejorado en cada una de
las últimas 3 campañas al punto que sus clientes piden “ese pollo de mejor
calidad” y están dispuestos a pagar más por su carne. Actualmente Invetsa ha
instalado más de 750 sistemas de alimentación en galpones de diferentes
compañías y tiene proyectos en más de 200 galpones para ser 100% automatizados.
“Es decir, al final del 2015 al menos el 20% de las granjas del Perú contará
con equipos de automatización avícola”, indica Edgardo Landa.
Clima
controlado:
En un clima muy caliente la gallina come menos, por lo tanto pone menos huevos
y el frío le da más hambre, lo que aumenta los costos de producción. Los
equipos de ventilación en una granja de gallinas ponedoras permiten controlar
de manera automática la temperatura y mantener el clima adecuado para alcanzar
la producción deseada.
Menos
tiempo:
Los cuidadores del galpón tradicional demoran al menos 4 horas al día, para abastecer el alimento y el
mantenimiento de los sistemas de agua. Los comederos automatizados suministran
el alimento fresco en menos de 20 minutos y los bebederos proveen agua todo el
tiempo.
Desperdicio
de alimento:
Cuando una persona distribuye el alimento, aproximadamente el 1% cae en el piso
y se desperdicia. Los comederos automatizados eliminan la merma del grano y por
lo tanto disminuyen los costos de producción.
Espacio: La
disposición actual de los galpones permite que en un espacio de 2,400 metros
cuadrados entren 28 mil pollos. Hoy
existe tecnología que permite que en 1,200 metros cuadrados se pueden criar 60
mil pollos, con mejores condiciones de vida, reduciendo el tiempo de crianza y
los costos de producción.
¿Por
qué los productores de aves no invierten en la automatización del galpón?
El principal obstáculo es el financiamiento.
La automatización total o parcial de una granja avícola puede requerir una
inversión promedio de $1 millón, que debería ser financiada en un plazo de 5
años para que genere rentabilidad.
Lamentablemente, a pesar de haber pasado más de 20 años de la crisis avícola de
los 90, el sector bancario aún no mira a la avicultura con entusiasmo, cuando
debería ser lo contrario si es planeada estratégicamente. Esto se debe
principalmente a la constante fluctuación del precio de la carne de pollo, que
afecta a los hogares de todo el país.
En ese sentido, el banco Eximbank, entidad
que promueve las exportaciones de productos y servicios estadounidenses hacia
mercados internacionales como el peruano, en coordinación con los bancos
americanos ya ha financiado proyectos por más de 10 millones de dólares en los
últimos 3 años, con tazas y condiciones muy atractivas.
Además debemos considerar que mientras
la tecnología permite el desarrollo de la avicultura en otras zonas, incluso en
países de Latinoamérica como Colombia y Chile, hasta hace poco en el Perú no
había propuestas completas, sino algunas opciones básicas e incluso pobres. Hoy
Invetsa está trabajando con el sector para capacitarlo y que pueda conocer
mejor cómo aplicar los equipos para automatizar sus galpones de manera correcta
y que signifique un retorno seguro de su inversión.
Edgardo
Landa
Director
Comercial de Invetsa
Desarrolló su experiencia en empresas comercializadoras
de vacunas avícolas y productos veterinarios para ganadería y mascotas, tanto
en la parte administrativa como en el área comercial. En 1992, Edgardo y sus
hermanos César y Belisario Landa Barsallo decidieron juntar su experiencia y
conocimientos del sector pecuario peruano para asociarse y llevar a cabo un
sueño. Inspirados por la labor de su padre, el Dr. Augusto Landa, quien ejercía
como médico veterinario en diferentes regiones del país, crearon Invetsa, como
respuesta a la necesidad del mercado
veterinario que ellos analizaron.
Sobre Invetsa
Al fundar Invetsa hace 22 años, sus gestores se
propusieron como meta ser un aliado en el desarrollo del sector pecuario del
país. Hoy en día, Invetsa distribuye y representa en Perú y Bolivia las marcas
más importantes de salud, nutrición y tecnología animal, siempre dispuestos a
brindar a sus clientes las mejores
soluciones y consultoría permanente, con una gestión orientada a la excelencia
operativa.